Misceláneas
Publicado: 22 Feb 2013 08:44
En este apartado podríamos poner imágenes de época que ilustren la actividad del Ahorro y libretas u otro material que muestren aspectos interesantes o anecdóticos de la misma.
Comienzo por esta imagen, proveniente de un cartel de la Caja, que muestra una escena de la primera época bastante sugerente:
También me pareció interesante este asiento, dentro de una libreta, que venía acompañado con una notita que se valida por el sello de la repartición:
El reglamento de la Caja indicaba que, en caso de que una persona discapacitada o analfabeta quisiese realizar una extracción, debía concurrir con dos testigos que dieran testimonio de su identidad y firmaran por ella.
La contratapa indica que la libreta pertenecía a una joven, de nombre Adelina, que abrió la libreta cuando tenía 6 años (típica edad en que comenzaban a ahorrar los escolares).
En el momento en que ocurre el incidente, 1947, Adelina tenía 36 años, es decir que ya era adulta y estaría en plena capacidad de retirar sus ahorros. El empleado de la Casa Central de la Caja inició el trámite de extracción de 40 pesos y llegó a registrarlo en la libreta, pero fue allí que descubrió algún impedimento. Analfabeta no sería porque en los datos personales indica que ya a los 6 años sabía leer y escribir; entonces podría ser que fuese ciega, o quizá careciese de documento de identidad, o vaya a saber que otro problema, la cuestión es que se anula el asiento de extracción y se entrega una notita con las indicaciones de los pasos a seguir.
Como estos son los últimos asientos de la libreta, parece que Adelina nunca recuperó sus 40 pesos.
Comienzo por esta imagen, proveniente de un cartel de la Caja, que muestra una escena de la primera época bastante sugerente:
También me pareció interesante este asiento, dentro de una libreta, que venía acompañado con una notita que se valida por el sello de la repartición:
El reglamento de la Caja indicaba que, en caso de que una persona discapacitada o analfabeta quisiese realizar una extracción, debía concurrir con dos testigos que dieran testimonio de su identidad y firmaran por ella.
La contratapa indica que la libreta pertenecía a una joven, de nombre Adelina, que abrió la libreta cuando tenía 6 años (típica edad en que comenzaban a ahorrar los escolares).
En el momento en que ocurre el incidente, 1947, Adelina tenía 36 años, es decir que ya era adulta y estaría en plena capacidad de retirar sus ahorros. El empleado de la Casa Central de la Caja inició el trámite de extracción de 40 pesos y llegó a registrarlo en la libreta, pero fue allí que descubrió algún impedimento. Analfabeta no sería porque en los datos personales indica que ya a los 6 años sabía leer y escribir; entonces podría ser que fuese ciega, o quizá careciese de documento de identidad, o vaya a saber que otro problema, la cuestión es que se anula el asiento de extracción y se entrega una notita con las indicaciones de los pasos a seguir.
Como estos son los últimos asientos de la libreta, parece que Adelina nunca recuperó sus 40 pesos.