Los custodios de un hobby que la era digital amenaza...

Centro Filatélico de Lomas de Zamora

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Ministerial
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Los custodios de un hobby que la era digital amenaza...

Mensaje por Ministerial »

20/01/2013 El Centro Filatélico de Lomas de Zamora tiene 72 años y más de 100 socios, algunos de ellos en Uruguay, Estados Unidos y España. Edita una revista y organiza exposiciones.

Muchos empezaron heredando el hobby de sus familiares. Otros, eligieron coleccionar estampillas en lugar de figuritas, como hacían otros chicos. Y algunos, como la anticuaria Margarita Medves, llegaron a la filatelia por casualidad, cuando en su negocio compró un viejo álbum con sellos postales y al abrirlo descubrió un mundo fascinante. “Fue hace más de 25 años y me enganché. Hoy me especializo en coleccionar relojes impresos en sellos postales de todo el mundo”, cuenta una de las tres mujeres integrantes del Centro Filatélico de Lomas de Zamora (Cefiloza), institución creada en 1941 que cuenta con más de 100 socios en el país y algunos en Uruguay, Estados Unidos y España, que hoy se comunican a través de Faceboock. “Somos una gran familia de investigadores y coleccionistas de sellos postales. Es una actividad que existe desde que el correo es correo”, explica Jorge Bianchi, presidente de la institución.

–La filatelia, ¿es un hobby en extinción?

–Bianchi: De alguna manera, sí. Las estampillas se siguen emitiendo en todos los países, pero cada vez es más difícil encontrarlas. La gente ya no está enterada de que puede comprar una estampilla y pegarla. Los más jóvenes no saben ni siquiera que existen. Es realmente una pena.

Cada sábado a la tarde los socios de Cefiloza se reúnen en el Círulo Católico de Obreros, en Lomas. Allí comparten conocimientos, hallazgos e intercambian estampillas. En un amplio salón de luminosos ventanales despliegan planchas y carpetas y observan detalles que se le escapan al neófito. “Los errores en las estampillas fueron desapareciendo a medida que avanzó la impresión. Cuanto más rudimentarias más errores había y eso es lo que investigamos. Una de las reglas de la filatelia es que cuanto menos unidades hay de una estampilla, más valor tiene. Estudiamos su impresión, la temática, el color, la filigrana, su historia, por qué fue emitida y que representaba”, explica Osvaldo Adolfo Facciolo, con 40 años de socio de la institución y 49 en la Asociación de Cronistas Filatélicos de la Argentina, la cual preside. “Soy coleccionista y especialista de estampillas con el escudo argentino. Es apasionante estudiar la historia postal de un sello”, dice.

La primer estampilla que se conoció en la historia fue emitida por el Ministerio del Tesoro de Gran Bretaña, el 14 de septiembre de 1839. La imagen de un penique negro fue el primer sello adhesivo que circuló en el mundo. “Hoy la estampilla más cara que se conoce es también de Inglaterra. Pertenece a la isla de San Mauricio. Quedan tres sueltas y una en una carta de 1850”, cuenta Facciolo.

–¿Y cuánto cuesta?

–Un millón de dólares.

La tarde transcurre entre cafés, intercambio de información y el interés por nuevos materiales que llegan. Son expertos, estudiosos, llevan años en el tema. Sin embargo, jamás pierden la pasión infantil por esas “figuritas difíciles”.

Fuente: Suplemento Zonal de Clarín de Lomas de Zamora http://lomasdezamora.clarin.com/histori ... 15143.html
calde77
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Re: Los custodios de un hobby que la era digital amenaza...

Mensaje por calde77 »

Gracias por compartír esa historia, me gustó mucho. La verdad yo no creo que las estampillas y la filatelia estén en decadencia. Hace pocos días escuché que hay una nueva aplicación para teléfonos móviles inteligentes en la cual puedes tomar una foto de donde estés y convertirla en una tarjeta postal. Es decir, una vez tomas la foto y pagas por el servicio, la compañía imprime la foto en una tarjeta postal y la envía a su destinatario. La tarjeta postal indudablemente va a compañada de una o varias estampillas dependiendo del franqueo.

Este es un ejemplo de como la tecnología puede ir de la mano con el correo físico.
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